El 25 de abril, Nepal sufrió su mayor seísmo en 80 años, que ha dejado a ocho millones de personas en zonas afectadas, en las que todavía queda mucho por reconstruir. Un informe de Save the Children, UNICEF, Plan Internacional y World Vision recoge las inquietudes de 2.000 niños y niñas afectadas. Destacan volver al colegio y a hogares seguros. "Nuestro alojamiento tiene mucho riesgo durante las grandes tormentas. Una noche, nos vimos obligados a permanecer despiertos para agarrar las lonas de plástico y evitar que se volaran", cuenta un menor. Niños y niñas de Nepal acuden a diario a los hogares "Amigos de la Infancia", que se presentan como puntos seguros y de atención a los menores, hasta que se reconstruyan las casas e instalaciones que quedaron destrozados con el seísmo.