Consejos para configurar los dispositivos electrónicos a prueba de niños

Los menores usan los móviles y las tabletas a edades más tempranas, por eso es importante configurarlos para que sean aparatos seguros mientras disfrutan de ellos

          
           Imagen: logoff
 
El 40% de los menores de dos años usa la tableta o el móvil de sus padres con regularidad, según el último informe FAROS del Hospital Sant Joan de Déu (Barcelona). Esta cifra se dispara al 72% en niños de hasta ocho años, y al 90% en pequeños de entre 10 y 15 años.  


 
Por eso, aunque la utilización responsable, creativa y supervisada de la tecnología tiene muchas consecuencias beneficiosas para los niños, también hay riesgos que conviene evitar, y cada vez más pronto.
 
A continuación se repasan los trucos y consejos para hacer que los dispositivos electrónicos sean seguros para los menores: bloquear las aplicaciones de compras, proteger los contenidos no apropiados para su edad y emplear apps que ayuden en estas tareas.

1. Bloquear las compras con apps

Uno de los peligros que conlleva dejar el móvil o tableta en mano de los pequeños son las llamadas apps freemium.

Muchas aplicaciones siguen este modelo de negocio, que permite descargarlas gratis, pero con algunas funciones de pago que se pueden adquirir con comodidad desde la propia app. ¿El problema? Es tan fácil que hasta un niño puede llegar a gastar mucho dinero sin darse cuenta.
 
Para evitarlo, lo conveniente es restringir las compras dentro de las aplicaciones.
 
En iOS, hay que abrir "Ajustes", dirigirse a "General", "Restricciones", activar la opción y luego elegir "Compras en la app".
 

Imagen: Elena Santos
 
En Android, en la Google Play Store se debe ir al menú de "Ajustes". Una vez allí, se busca la sección "Controles de usuario", y dentro de esta, una opción llamada "Pedir autentificación para realizar compras".
 
De esta forma se puede configurar el móvil para que siempre solicite la contraseña en todas las adquisiciones que se hagan.

2. Bloquear contenidos no apropiados para niños

A veces no es suficiente con bloquear las compras dentro de las aplicaciones, y lo que preocupa es que los menores puedan acceder a contenido no apropiado a su edad, que instalen o desinstalen programas sin ningún control o incluso que puedan compartir su ubicación con desconocidos.
 
Por suerte, tanto iOS como Android tienen algunas opciones con las que controlar el contenido al que acceden los niños.
 
En iOS, basta con dirigirse al mismo menú que en el punto 1 ("Ajustes", "General", "Restricciones") y ver que, además de bloquear las compras dentro de las apps, también es posible restringir el acceso a la cámara, bloquear el navegador web o evitar que se instalen o desinstalen aplicaciones.
 

Imagen: Elena Santos
 
Otra opción interesante de iOS es la posibilidad de poner el iPhone o iPad en modo "Acceso Guiado", pues deja el dispositivo bloqueado en una sola app, sin posibilidad de salir de ella y volver a la pantalla principal.
 
Es idóneo, por tanto, para usarlo dejando la aplicación o juego que se quiera que el niño utilice en primer plano, con la seguridad de que no saldrá de ahí.
 
Para activarlo, no hay más que abrir "Ajustes", ir a "General" y luego a "Accesibilidad". Allí está la opción "Acceso Guiado".
 

Imagen: Elena Santos
 
 
En Android, por su parte, los controles parentales están en la misma sección de la Google Play Store que se citaba en el punto 1 ("Ajustes" > "Controles de usuario").
 
Con ellos se podrá limitar el contenido al que tienen acceso los pequeños en la tienda de apps, según la clasificación por edades.
 
Si el dispositivo Android es una tableta, y además dispone de la versión 4.3 o superior del sistema operativo, también está la posibilidad de crear un perfil de usuario limitado para el niño.
 
Se hace desde la sección "Usuarios" dentro de "Ajustes". Consiste en un perfil con acceso restringido a contenidos y apps, que se podrá personalizar según las necesidades. 

3. Aplicaciones para hacer el teléfono seguro para los niños

Cuando las opciones de control parental no son suficientes, siempre queda la alternativa de instalar una aplicación con la que controlar el uso que hace el menor de los dispositivos.
 
En el caso de iOS, al ser un sistema más cerrado, estas apps están bastante limitadas y no dan muchas opciones más allá de las que el sistema trae por defecto -o la posibilidad de poner un horario de uso a la tableta-. Dos de ellas son ParentKit o Qustodio.
 

Imagen: iTunes
 
 
Imagen: iTunes
 
En cambio, con Android hay muchas más opciones de control sobre las actividades del pequeño con el móvil o la tableta. Una de las alternativas es Kids Place, una aplicación que posibilita crear un área segura para el niño, separada del resto del teléfono, y con acceso solo a las apps y funciones permitidas.
 
Imagen: Google Play

Kids Place se protege mediante un código de seguridad, y sus opciones de configuración permiten seleccionar las funciones y apps a las que se quiere que el niño tenga acceso, así como dejarle o no que use la conexión a Internet. 
 
  • Siga en Twitter a la autora del artículo, Elena Santos: @chicageek.

Cinco consejos para mejorar la relación de los niños y la tecnología

El informe FAROS confirma el impacto de la tecnología en los niños, incluso entre los más pequeños. De ahí que sea muy importante tener en cuenta algunos aspectos al educar a los menores en el manejo de la tecnología.
 
1. La tecnología es buena, siempre que se haga un uso racional de ella. No es buena idea pasarse diez horas al día utilizando la tableta o el móvil.
 
2. La tableta no es una niñera. Siempre que sea posible, hay que acompañar al pequeño cuando emplee el dispositivo. Si no se puede estar al 100% con él, al menos no permitir que use la tableta solo en su habitación. Y, por supuesto, nada de móviles en la mesa durante las comidas.
 
3. Educación ante todo. A los niños se les debe enseñar a utilizar la tecnología. Hay que olvidarse del mito de los nativos digitales. Los menores necesitan que se les diga qué está bien y qué está mal también en Internet. No está de más aprovechar esos ratos con el pequeño para explicarle conceptos como la seguridad en línea y la privacidad o las normas básicas de etiqueta en la Red.
 
4. Hay otras formas de pasar el rato. Muchos niños se sienten muy atraídos por los gadgets, las consolas y otros dispositivos electrónicos, pero es importante encontrar el equilibrio entre esas formas de entretenimiento y otras lejos de las pantallas, como la lectura, los juegos de mesa o el deporte.
 
5. Si nos involucramos todos, ganamos. La manera de incorporar la tecnología en la vida de un menor de forma natural es que toda la familia se implique en ello; que sea parte de la vida familiar, pero sin robar demasiado tiempo; que las normas de uso se apliquen a todos por igual; y que se utilice de modo responsable y seguro.
 

 
Por ELENA SANTOS
 
 

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