Acelera la carga de los iconos de Windows con este sencillo cambio en el registro
Todos los archivos de nuestro sistema operativo están asociados a un icono concreto de manera que, de una simple vista, seamos capaces de diferenciar un tipo de archivo de otro. Estos iconos de Windows se almacenan en una especie de caché del sistema operativo de manera que cuando abrimos una carpeta estos se muestren instantáneamente sin tener que cargarlos y procesarlos uno a uno cada vez y poder ahorrar también recursos en el sistema.
En ocasiones, es posible que Windows tenga un problema con la caché de estos iconos y que esto cause problemas a la hora de abrir las carpetas con nuestros archivos, especialmente las primeras carpetas que abramos al iniciar el ordenador o cuando intentamos abrir una carpeta con un gran número de archivos diferentes.
En la mayoría de las ocasiones, este problema se debe a que la caché es demasiado pequeña y no es capaz de guardar en ella todos los iconos diferentes que necesitamos, por lo que se está vaciando constantemente.
Para solucionar este problema y garantizar un correcto funcionamiento de la caché de iconos es posible aumentar el tamaño destinado a este fin realizando un sencillo cambio en el registro de Windows.
Cómo aumentar la caché de iconos de Windows
Este truco es válido tanto para Windows 7 como para Windows 8.1 y Windows 10. Antes de seguir os recomendamos utilizar el editor de registro de Windows con cuidado y no modificar ningún valor sin que seamos exactamente lo que estamos haciendo, ya que nuestro sistema podría dejar de funcionar.
Para aumentar la caché de los iconos, lo primero que debemos hacer es abrir la ventana de “Ejecutar” pulsando el atajo de teclado “Win+R” y teclear en ella “regedit“.
Se nos abrirá el editor de registro de Windows, donde nos desplazaremos hasta la ruta:
HKEY_LOCAL_MACHINE\SOFTWARE\Microsoft\Windows\CurrentVersion\Explorer
A continuación, hacemos clic con el botón derecho en el cuadro grande del editor y seleccionamos “Nuevo > Valor de cadena“. Nos creará una nueva entrada en el registro, la cual debemos llamado “Max Cached Icons“, sin las comillas.
Una vez creada esta entrada hacemos doble clic sobre ella y editamos su valor. El valor que asigna por defecto Windows a la caché de iconos es de 500KB, por lo que nosotros vamos a introducir en el cuadro “Información del valor” 4096, lo que equivale a una caché de 4 MB.
Una vez introducidos estos valores simplemente reiniciamos nuestro ordenador para que los cambios surtan efecto y, cuando vuelva a arrancar, veremos cómo todos nuestros iconos cargan de una forma mucho más rápida y fluida.
Si queremos revertir los cambios, podemos asignar un valor de 500 a la entrada “Max Cached Icons” o simplemente eliminar dicho valor para que Windows vuelva a cargar los valores por defecto del sistema operativo.
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