Receta de pastel de alcachofas
TEMPORADA: primavera, verano, otoño, invierno - 5-10 € - 4 comensales
Ingredientes (4 personas)
- 200 g de alcachofas limpias
- 50 g de queso fresco de burgos
- 50 g de salsa de tomate casera
- 4 huevos
- 100 ml de nata líquida
- un manojo de perejil
- 100 g de lechugas variadas como guarnición
- 50 g de salsa alioli suave
Cómo se elabora
Retiramos las hojas exteriores de las alcachofas hasta llegar a la parte tierna y cortamos los tallos y las puntas. Las remojamos en agua antes de introducirlas en una cazuela con abundante agua.
Incorporamos un manojo de perejil y un puñito de sal, y cocemos durante unos 20 minutos. Abrimos las alcachofas cocidas por la mitad y reservamos.
Cascamos los huevos en un bol. Sazonamos ligeramente con una pizca de sal y batimos con la ayuda de una varilla. Incorporamos la nata líquida y unas cucharadas de salsa de tomate casera y continuamos batiendo hasta que quede una mezcla homogénea.
Untamos un molde con mantequilla y harina. En el fondo vertemos una parte de la crema de huevos y nata. Encima colocamos las alcachofas cocidas y troceadas, y unos daditos de queso fresco.
Cubrimos todo con la mezcla de huevo, nata y tomate restante. Colocamos el molde sobre una bandeja de horno con la base cubierta con agua (para cocer al baño maría y que no se seque el pastel de alcachofas).
Horneamos al baño maría a 180º C durante unos 30 minutos, comprobamos que ha quedado cuajado el pastel de alcachofas introduciendo una brocheta y comprobando que esta salga limpia.
Una vez cuajado el paste de alcachofa, sacamos del horno y dejamos templar en el molde sobre una rejilla para que se enfríe antes.
Desmoldamos y acompañamos con una ensalada de lechugas variadas y unas cucharadas de salsa alioli suave.
COMENTARIO DIETÉTICO
La alcachofa es una hortaliza con grandes beneficios para el organismo. Es muy rica en fibra, lo que ayuda al tránsito intestinal y reduce los niveles de insulina en sangre.
Contiene fósforo, hierro, magnesio, calcio, potasio y vitaminas B1, B3 y C. Contiene cinarina, una sustancia que estimula secreción biliar favoreciendo la digestión de las grasas y es fuente de fitoesteroles y flavonoides con acción cardioprotectora.
La presencia de queso fresco aporta altas dosis de vitaminas y minerales entre los que destacan las vitaminas A, B y D y el calcio, magnesio, hierro y potasio.
Es una variedad que tiene un contenido mínimo de grasas. Se suma a la receta la lechuga, un alimento altamente diurético y muy recomendable en dietas de adelgazamiento, obesidad o hipertensión.
Destaca la presencia de calcio, magnesio, fósforo y sodio y es ademas fuente de oligoelementos como el selenio. Posee grandes cantidades de aminoácidos esenciales y vitaminas A, C y E.
La receta final, debido a la presencia de nata líquida, suma grandes cantidades de grasa saturada y calorías, que hacen de esta receta un plato a consumir de manera muy esporádica y con moderación.
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