Apagón tecnológico: La Hora del Planeta

El 28 de marzo ciudades, empresas y personas de todo el mundo apagarán sus luces en La Hora del Planeta
 
                                        
                                        Imagen: WWF
 
Este próximo sábado 28 de marzo de 20:30 a 21:30 horas será La Hora del Planeta. Esta iniciativa de la organización conservacionista World Wide Fund for Nature (WWF) nos propone apagar la luz durante esa hora para concienciarnos de la importancia de luchar contra el cambio climático y en defensa del medio ambiente 

 
Cientos de ciudades, empresas o instituciones de toda España se han unido a esta campaña ambiental, una de las mayores a nivel global, que se celebra por noveno año consecutivo. Este artículo señala qué es La Hora del Planeta, ofrece consejos para hacer esta hora todo el año y cómo serán estos 60 minutos en la Red.

Qué es La Hora del Planeta

La Puerta de Alcalá de Madrid, la Alhambra de Granada, la Sagrada Familia de Barcelona, el Museo Guggenheim de Bilbao, la catedral de León, la Mezquita-Catedral de Córdoba, la Torre del Oro de Sevilla, la Ciutadella de Menorca, el Castillo de Bellver de Palma de Mallorca, las Casas Colgadas y Hoz del Huécar de Cuenca, la Muralla de Ávila, la Torre de Hércules de A Coruña, etc.
 
Todos estos monumentos emblemáticos españoles, y otros muchos más que se han sumado, tienen algo en común: el 28 de marzo a las 20:30 horas apagarán sus luces hasta las 21:30 horas en La Hora del Planeta.
 
Por noveno año consecutivo, esta campaña mundial de WWF pretende concienciarnos en la lucha contra el cambio climático y, en general, por la defensa del medio ambiente.
 
Además de los ejemplos monumentales citados, empresas e instituciones de todo el mundo se suman a la iniciativa de apagar sus luces para demostrar su compromiso.
 
Según WWF, un gesto diario de compromiso ambiental realizado por todos tiene la capacidad de transformar el planeta.
 
La Hora del Planeta es una de las principales acciones de concienciación ambiental a nivel global. Sus responsables pretenden batir de nuevo las marcas registradas el año pasado, cuando participaron más de 7.000 ciudades de 160 países de todo el mundo.
 
La Torre Eiffel de París, el Cristo Redentor de Río de Janeiro, las cataratas del Niágara, San Pedro del Vaticano o la Acrópolis de Atenas fueron algunos de los lugares emblemáticos que tuvieron apagadas sus luces.
 
Pero los verdaderos protagonistas de esta iniciativa son los ciudadanos. WWF ha organizado diversas actividades y celebraciones en las ciudades adheridas a la campaña, así como actividades educativas para que los maestros realicen con sus alumnos.
 
En Madrid, por ejemplo, una maqueta del planeta Tierra de cuatro metros se encenderá con luces LED alimentadas por la energía limpia generada con el pedaleo de bicicletas movidas por los asistentes a la convocatoria.
 
La Hora del Planeta se inició en Sidney (Australia) en 2007, cuando dos millones de personas apagaron sus luces durante una hora para reclamar acciones contra el cambio climático.
 
Un año después, 370 ciudades de más de 35 países convirtieron esta iniciativa en un movimiento global por la sostenibilidad, al conseguir que entre 50 y 100 millones de personas apagaran las luces en La Hora del Planeta 2008.
 
La campaña ha ganado año tras año adhesiones de instituciones, empresas y ciudadanos de todo el mundo, hasta convertirse en una de las acciones ecologistas más importantes del año.

Consejos para hacer La Hora del Planeta todo el año

Las emisiones del sector eléctrico peninsular de dióxido de carbono (CO2), uno de los principales gases de efecto invernadero involucrados en el cambio climático, se han estimado para el año pasado en 60,1 millones de toneladas, según el avance de su informe sobre la demanda de electricidad en España en 2014 de Red Eléctrica Española (REE).
 
El uso de combustibles fósiles conlleva también la emisión de sustancias y gases nocivos para el medio ambiente y la salud, una contaminación que cuesta millones de euros.
 
Una parte de la electricidad proviene de las centrales nucleares, con el riesgo de los residuos radiactivos o la posibilidad de un accidente.
 
Por tanto, cuanta menos electricidad se utilice, menos CO2 y menos contaminación se produce, y el bolsillo también lo agradece.
 
Por ello, La Hora del Planeta debería extenderse al resto del año. Los consumidores pueden asumir algunos consejos para hacerlo posible:

Consumir la luz de forma sostenible: la iluminación puede suponer hasta la mitad del recibo, si no se emplea bien.
 
Para evitarlo, hay que apagar las luces si no se usan, aprovechar al máximo la luz natural, pintar de colores claros paredes y techos, utilizar bombillas de bajo consumo y mantenerlas limpias, al igual que las tulipas, colocar economizadores de energía, etc.
 
Instalar aparatos de bajo consumo: además de las citadas bombillas, los sistemas de climatización o los electrodomésticos más eficientes (de la clase A+++) ahorran electricidad y dinero.
 
Usar páginas web gratuitas para ahorrar energía: en ellas, los consumidores pueden calcular su gasto energético y aprender a reducirlo.
 
Contratar una Empresa de Servicios Energéticos (ESE): la eficiencia energética permite gastar menos energía para producir lo mismo. Una ESE puede lograr ahorros de entre un 20% y un 50% de energía.

El apagón en la Red

                
                 Imagen: Facebook
En Internet, la iniciativa del apagón se sigue sobre todo en las redes sociales Facebook y Twitter, que cuentan con un mayor número de participantes.
 
Pero además, la organización ecologista WWF tiene su propia página oficial del evento, donde explica los motivos de esta campaña y muestra la agenda de actividades en las distintas ciudades españolas.
 
Además, WWF quiere que los ciudadanos comprometidos acudan el 28 de marzo a las 18:00 horas a la plaza de Oriente de Madrid a bailar por el planeta.
 
En Facebook, la página más seguida, con más de 170.000 fans, es La Hora del Planeta. En Twitter, WWF promueve el "hashtag" (palabra precedida del signo # para facilitar su búsqueda) #tupoder, donde algunos seguidores que dejan sus mensajes con esta clave, pero es #yourpower el término que triunfa en todo el mundo y cuenta con miles de comentarios que animan a sumarse a la acción del sábado.
 
El consumo energético en Internet adquiere creciente importancia a medida que se reduce la brecha digital entre ciudadanos, por lo que se recomienda aspirar a la eficiencia energética también en este campo.
 
Aunque hay pocas investigaciones sobre el sector, algunas estimaciones situaban el consumo de la Red en el 2% de la energía mundial ya en 2011. En la actualidad, este porcentaje podría haber aumentado, si bien muchas tecnologías han afinado su eficiencia energética.
 
Un estudio de la Universidad de Universidad de California en Berkeley (EE.UU.) estimó en ese año, tras analizar los datos procedentes de los fabricantes de hardware, que existían entonces cerca de 750 millones de ordenadores, unos 1.000 millones de teléfonos inteligentes y no menos de 100 millones de servidores en todo el mundo, que hacían que se necesitasen entre 170 y 307 gigavatios para que Internet se mantenga.


         Imagen: WWF
 
Además, la consultora de eficiencia tecnológica 1E calculó en 2010 que, con una administración de energía óptima, las compañías podrían llegar a ahorrar unos 75 dólares por ordenador al año.
 
EROSKI CONSUMER ha publicado a lo largo de los últimos años diferentes artículos con consejos para disminuir el consumo de energía en portátiles y también en smartphones.

Etiquetas: cambio climático, energía


Por ALEX FERNÁNDEZ MUERZA Y JORDI SABATÉ
 
 

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